Sanidad Forestal

Hoy en día la salud y vitalidad de los bosques toma cada vez mayor importancia en el manejo forestal, tanto para bosques productivos sometidos a acciones activas de técnicas silviculturales, como para aquellos bosques de conservación manejados mediante acciones pasivas. Esto se debe a la entrada progresiva de plagas y enfermedades exóticas forestales y al cambio del comportamiento de agentes nativos, relacionado con el cambio climático y a las diferentes perturbaciones de origen antrópico que sufren los ecosistemas boscosos plantados y naturales.

En este contexto es que CONAF basa su trabajo de protección fitosanitaria en el Manejo Integrado de Plagas Forestales (MIP), siendo primordial en primera instancia el conocimiento de la dinámica de plagas y su epidemiología, y la dinámica de los hospederos y sus estrategias de crecimiento y supervivencia. Una vez conocida la plaga y el rodal, se trabaja en técnicas de tratamientos, que en el caso forestal, se reduce a técnicas silviculturales y de control biológico, excluyendo el uso de pesticidas. Se continúa en determinar el impacto sobre los valores de los recursos, para evaluar finalmente el costo beneficio de la aplicación de los esquemas de protección posibles de identificar.

De esta manera la Corporación se enfoca en el monitoreo, diagnóstico, desarrollo de líneas de investigación, planificación y ejecución de programas de manejo integrado de plagas y enfermedades en bosque nativo y plantaciones forestales.

Programa de Control biológico: Este programa tiene como objetivo controlar las principales plagas de importancia forestal a través de la producción masiva de los agentes biológicos necesarios para el control de plagas de las plantaciones de Pino y Eucalipto.

  • Producción y establecimiento del parasitoide Orgilus obscurator, biocontrolador de Rhyacionia bouliana (polilla del brote).
  • Producción y establecimiento de Anaphes nitens, parasitoide de huevos de Gonipterus sp (gorgojo del eucalipto)
  • Producción de Deladenus siricidicola, nemátodo biocontrolador de Sirex noctilio.

Las superficies sometidas a control biológico superan las 32.000 hectáreas anuales, corresponden a plantaciones de pequeños y medianos propietarios forestales y se realizan de manera gratuita, como apoyo a aquellos propietarios que soliciten asistencia.

En el caso de los bosques nativos, estos actualmente se encuentran presionado por múltiples agentes, en su mayoría nativos, los cuales tiempo atrás se encontraban en equilibrio con sus hospederos, condición que ha cambiado debido al cambio climático y a perturbaciones antrópicas en los ecosistemas naturales.

Tomando esto en consideración, CONAF lidera acciones de monitoreo de la salud de ecosistemas mediante prospecciones fitosanitarias terrestres, además de desarrollar líneas de investigación de los principales agentes determinados, con el objeto de contar con información sobre los tipos forestales y sectores más afectados, generar información biológica necesaria para el desarrollo de estrategias de control y de esta forma, poder planificar y priorizar acciones en el territorio.

Uno de los grandes desafíos es la afectación observada en bosques de Nothofagus, donde se encuentran en desarrollo trabajos enfocados principalmente en los bosques bajo manejo forestal o multipropósito, incluyendo las plantaciones de estas especies. Mediante prospecciones y monitoreo en terreno, se han identificado agentes que afectan de manera directa el manejo productivo e incluso la sobrevivencia del bosque mismo. Un ejemplo de esto es Proholopterus chilensis, barrenador de madera que durante los últimos años ha presentado cambios en su comportamiento y niveles poblacionales, aumentando la necesidad de un manejo que disminuya la abundancia al equilibrio natural. Otro ejemplo es el complejo de defoliadores asociado a bosques de Nothofagus, en el cual se han visto ataques masivos al follaje de especies en plena temporada productiva, lo cual limita su crecimiento y capacidad de sobrevivencia. En ambas especies, se encuentran líneas de trabajo en desarrollo enfocadas en el conocimiento de la biología de los agentes de daño, la respuesta de los hospederos y estrategias de control sustentables e innovadoras.