El uso del fuego tiene como finalidad evitar que se produzcan incendios forestales producto de una quema mal ejecutada
Quemas controladas
La regulación y administración del uso del fuego se rige por el DS N°276 (1980), modificado por el DS N°34 (2016) del Ministerio de Agricultura, en el que se permite el uso del fuego solo en forma de quema controlada en terrenos agrícolas, ganaderos o de aptitud preferentemente forestal, hayan sido o no estos últimos declarados como tales ante CONAF, y siempre que ésta tenga por fin uno o más de los siguientes objetivos:
- Quema de rastrojos
- Quema de ramas y materiales leñosos en terrenos aptos para cultivos
- Requema para siembras inmediatas
- Quema de zarzamoras u otra vegetación cuando se trate de construir y limpiar vías de comunicación, canales o cercos divisorios
- Quemas de especies vegetales consideradas perjudiciales
- Quemas en terrenos de aptitud preferentemente forestal y con el fin de habilitarlos para cultivos silvopecuarios o con fines de manejo silvícola, siempre que no se infrinja el Decreto Ley Nº701, artículo 5º de la Ley de Bosques, la Ley N°20.283, Sobre Recuperación del Bosque Nativo y Fomento Forestal y demás disposiciones sobre protección pertinentes.
CONAF tiene la potestad de administrar el uso del fuego desde Arica y Parinacota hasta Magallanes. Para la ejecución de quemas se establece un calendario donde se señalan los días y horarios en que se pueden realizar quemas controladas; además, se establecen condiciones y medidas de seguridad antes de realizar la quema para que esta se ejecute bajo control.
La persona interesada debe dar aviso de la intención de quemar, al menos con un día de anticipación, en las oficinas receptoras que CONAF ha habilitado para este trámite.
Importante: este calendario puede sufrir modificaciones de acuerdo a la contingencia por incendios forestales o condiciones meteorológicas o por Botón Rojo, consulte en las oficinas receptoras.
Alternativas a las quemas
El uso del fuego como técnica para el manejo de residuos vegetales tiene como objetivo principal eliminar los residuos para preparar los terrenos para cultivos o plantaciones y además, es una herramienta importante en la prevención y mitigación de los incendios forestales.
En promedio anualmente se tratan con fuego sobre 200 mil hectáreas de residuos del tipo agrícola y forestal, por lo que se hace necesario promover técnicas para que éstos puedan ser reutilizados y de esta forma aportar nutrientes y minerales al suelo o dar un valor agregado a su uso.
Dentro de las técnicas de reutilización de residuos post cosecha o de rastrojos más utilizados se tienen:
- Producción de alimento para ganado
- Compostaje
- Lombricultura y vermicompostaje
- Sustrato para cultivo de hongos comestible
- Triturado e incorporación
- Biomasa para generación de energía, entre otras.