De 957 incendios investigados en el periodo 2021-2022, CONAF aumentó a 1.818 incendios periciados a la fecha. Además, creció de 12 a 24, la cantidad de unidades de análisis y diagnóstico, distribuidas entre las regiones de Coquimbo y Magallanes, con el objetivo de determinar el origen y causa de estos incendios, todo con el fin de enfocar las gestiones preventivas y mitigatorias en el territorio nacional, como asimismo apoyar el trabajo del Ministerio Público en su función de persecutor de delitos.
Así lo manifestó el director ejecutivo de la Corporación Nacional Forestal, Christian Little durante el balance de la temporada 2022-2023, al señalar que “el Ministro de Agricultura, Esteban Valenzuela solicitó que nuestro énfasis fuera la prevención y la investigación, con la finalidad de ir orientando nuestra labor en terreno y para ir bajando los índices de accidentabilidad e intencionalidad. Por ello es que hemos incorporado 40 nuevos profesionales a las unidades de investigación”.
Durante esta temporada, hasta la fecha, se han investigado 1.818 incendios a nivel nacional (cuatro se encuentran en proceso), equivalentes al 26% del total de los incendios, según el último reporte del Departamento de Prevención y Mitigación. De los siniestros investigados, el 65% (1.179) fue catalogado como accidental o negligente, el 33% (591) como intencional y el 2% (44) sin un origen determinado.
“Estamos preocupados por la alta cifra de intencionalidad, porque aquí hay un propósito de hacer daño, el cual además, afecta a la vegetación, también a la gente que pierde todo, y en ocasiones con pérdidas de vida humana. Este año fallecieron 26 personas”, explicó Christian Little.
Es por ello, que la institución realiza un fuerte trabajo educativo hacia la comunidad en la prevención, labor que se desarrolla principalmente en establecimientos escolares, comunidades rurales, personas que transitan en los campos durante el verano, etc.; junto con la instrucción de la gente que habita espacios rurales y de interfaz por el alto riesgo, como preparar las casas y su entorno para sobrevivir al paso del fuego, además de fortalecer los conocimientos de qué hacer en caso de una condición de emergencia.
Entre las tres primeras causas específicas de los incendios se encuentran la intencionalidad en general (33%), las quemas de desechos (14%) y actividades dentro de las faenas agrícolas (9%).
Respecto a las regiones, Biobío es la que presenta el mayor porcentaje de intencionalidad con un 60%, le sigue La Araucanía con 47% y Valparaíso con 37%.
Frente a este escenario, “CONAF ha intensificado su programa de capacitación y coordinación con fiscales regionales en investigación de origen y causa. Esta gestión ha permitido capacitar a 28 fiscales en 8 regiones, en un trabajo conjunto con el Ministerio Público”, sostuvo la autoridad.
Daño evitado
Por otra parte, la Corporación Nacional Forestal dio a conocer que en 15 incendios ocurridos entre las regiones de Maule y La Araucanía, que afectaron 190.568 hectáreas, el trabajo de CONAF concluyó que se evitó un daño en 323.000 hectáreas, aproximadamente. En cuanto a pérdidas directas de vegetación en estos siniestros, se estimaron mermas por US$ 531 millones y pérdidas económicas evitadas de vegetación por US$ 786 millones.
Finalmente, en estos 15 incendios forestales se registró una afectación de 3.746 viviendas, lográndose salvar 46.000 viviendas, aproximadamente. Mientras que desde la perspectiva económica, las pérdidas por viviendas fueron de US$ 82 millones y las pérdidas evitadas de US$ 1.257 millones.
*Se adjunta reporte de incendios forestales con causa investigada.
Powered By EmbedPress