Un conversatorio sobre “Experiencias Positivas ante Incendios Forestales en Áreas Protegidas”, considerando las realidades de Chile y Perú, convocó a guardaparques y profesionales relacionados a la protección del patrimonio natural y cultural de varios países de Latinoamérica.
La jornada de carácter online fue organizada en el marco del convenio de colaboración que mantienen la Corporación Nacional Forestal (CONAF) y el Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado de Perú (SERNANP), congregando a más de 100 participantes de los países organizadores, así como también de Argentina, Bolivia, Venezuela, España y Portugal.
Por parte de Chile fueron presentadas las experiencias aprendidas respecto a la administración de emergencias vinculadas a la Reserva Nacional Lago Peñuelas, en la región de Valparaíso, y del Parque Nacional Torres del Paine, en la región de Magallanes.
Oscar Salazar Silva, administrador de la Reserva Nacional Lago Peñuelas, se refirió a la magnitud del último megaincendio que afectó al territorio, en febrero de 2024, alcanzando más de 3 mil hectáreas de vegetación nativa consumidas por el fuego, además de perdida en infraestructura en el área protegida. En atención a ello, ahondó en las experiencias sacadas y la implementación de nuevas tecnologías para la detección temprana de incendios, a través de un proyecto piloto en el marco de un convenio entre CONAF y Axess Networks, filial en Chile de la empresa española Hispasat, que consiste en la integración de sensores, cámara panorámica de espectro visible e infrarrojo y un sistema de comunicaciones satelital, cubriendo 6.189 hectáreas dentro de un perímetro de 35 kilómetros, lo que permitirá detectar incendios de manera eficaz, reduciendo tiempos de respuesta y riesgos asociados.
En tanto, Michael Arcos Valenzuela, jefe del Departamento de Áreas Protegidas de Magallanes, expuso sobre los incendios históricos al interior del Parque Nacional Torres del Paine, en los 1985, 2005 y 2011, que se tradujeron en más de 35 mil hectáreas afectadas, con causalidades asociadas al turismo. Al respecto, indicó que estos siniestros cambiaron el paradigma en materias de gestión de riesgo para la zona, considerando la contratación de dotación para una unidad local de brigadistas y maquinaria de combate al fuego, que ha permitido acortar los tiempos de respuestas en emergencias suscitadas en años posteriores. Asimismo, estos incendios tuvieron repercusiones en cambio legales que actualmente consideran la tipificación de delito y sanciones asociadas para quienes provoquen incendios al interior de áreas protegidas.
Respecto a Perú, fueron presentadas experiencias del Parque Nacional Huascarán y el Santuario Histórico del Machupicchu, en materias de trabajo colaborativo con comunidades campesinas para la prevención de incendios y respuesta oportuna en emergencias declaradas.
Edson Ramírez Hinostroza, especialista del Parque Nacional Huascarán, expuso sobre los programas de prevención y control de incendios vinculados a comunidades campesinas aledañas al área protegida, dentro de las cuales se encuentran quienes tienen derecho de consumo de pastos. Asimismo, se refirió a la corresponsabilidad en materias preventivas para comunidades con asignación de concesiones de turismo, así como capacitación en ecología del fuego y entrega de equipamiento a comuneros locales para tareas de combate al fuego, un tema que difiere respecto al marco normativo existente en nuestro país.
Finalmente, Jessica Morón Álvarez, especialista del Santuario Histórico del Machupicchu, detalló sobre el plan integral de prevención de incendios que existe en esta área protegida, explicando que la ocurrencia de estas emergencias suelen ser inducidas por la acción humana y están relacionadas principalmente a actividades de quema de pastos, conllevando consecuencias en la destrucción de la cobertura forestal, la pérdida de fauna silvestre, así como la contaminación de las aguas y del aire. Entre las principales acciones que se destacan en este territorio está la capacitación a comunidades locales en ecología y manejo del fuego, así como la detección temprana de zonas de riesgo.