20 de mayo, 2013

El guanaco: Emblema de las Áreas Silvestres Protegidas de Atacama en ascenso

Cada año se realizan dos censos de guanacos en cada uno de los parques nacionales de la Región de Atacama, durante los últimos tres años estos conteos dan cuenta de un aumento en el número de individuos reportados durante la temporada estival.

El guanaco (Lama guanicoe) es una especie de camélido representativo de la fauna de la región. Su cacería histórica y las amenazas actuales de cacería ilegal, la fragmentación del hábitat y el ataque por perros, ha puesto a esta especie en Peligro de extinción en la Macrozona norte de Chile.

Además de las variables antrópicas que impactan a las poblaciones de guanacos en la Región de Atacama, se suma la presión natural representada en las grandes fluctuaciones en la disponibilidad de alimento, el cual depende fuertemente del régimen de lluvias.

Este camélido americano se encuentra presente en los tres parques nacionales de la Región de Atacama: Llanos de Challes, Nevado de Tres Cruces y Pan de Azúcar, representado uno de los principales objetos de conservación de las unidades. Con el objeto de monitorear las poblaciones y poder determinar la fluctuación en la cantidad de guanacos en cada área protegida, se realiza bianualmente censos de esta especie. Con los datos entregados en cada censo, se puede evidenciar la presencia de algunas problemáticas o el efecto de las acciones de conservación implementadas o de las variables ambientales que modelan las poblaciones de guanaco de cada unidad.

Entre febrero y abril del presente año se desarrolló la actividad del censo por el periodo estival, una actividad que está liderada por los administradores de cada unidad y es ejecutada por el personal de guardaparques de las áreas protegidas. Los censos se realizan durante tres a cinco días recorriendo rutas preestablecidas y fijas durante los años, con el objeto de poder comparar los resultados encontrados.

En relación a esta actividad que ya es tradicional en la administración de CONAF, Diego Morales director regional afirmó que “dentro de las principales funciones que tiene CONAF como organismo a cargo de la administración del SNASPE, se encuentra el monitoreo de las poblaciones de camélidos que albergan los Parques Nacionales, con ello junto con diagnosticar su estado, es posible focalizar  y orientar los esfuerzos y recursos institucionales en pro de avanzar en su conservación efectiva,  haciendo frente a las amenazas que puedan estar amagando a este importante camélido nativo”.

Respecto a la conservación efectiva Morales Banda indicó que “de todas maneras la tratarse un megamamífero que no respeta límites de parques y por ende se desplaza por todo el territorio  es fundamental actuar coordinadamente con otros organismos relacionados con su protección, es el caso de nuestros colegas del SAG y su responsabilidad como administradores de la ley de caza, la Seremi de Medio Ambiente, la Bridema de la PDI, la Armada, Carabineros, PTI, municipios, entre otros. Es claro que la conservación efectiva de este camélido requiere la acción articulada del estado”.

Un análisis histórico preliminar basado en el número total de individuos observados durante los censos en la temporada estival en las tres áreas protegidas muestra una amplia fluctuación con una tendencia a la declinación en el número de individuos, la cual alcanzó valores tan bajos como 36 individuos en el PN Pan de Azúcar. Sin embargo, en los últimos años, en las tres áreas protegidas se ha observado un aumento en el número de guanacos reportados durante esta temporada lo cual tiene una gran influencia de los años lluviosos 2011 y 2012, a lo que se suma acciones de protección de la especie como la educación para la conservación, la fiscalización de la cacería ilegal y el trabajo de concientización de la problemática perros-guanacos con los pobladores aledaños a las áreas protegidas.

“A pesar de que se evidencia una recuperación en las poblaciones de guanacos en las tres áreas protegidas, es importante destacar que las medidas de conservación de la especie deben reforzarse, ya que con el aumento en el número de individuos se incrementa la probabilidad de conflicto por cacería ilegal y el ataque de perros asilvestrados” afirma Amancay Cepeda, bióloga  y analista de conservación de diversidad biológica de CONAF Atacama.

La cacería ilegal de guanacos en la Región de Atacama se realiza con ayuda de perros adiestrados, esta amenaza se evidencia más fuertemente en el sector del PN Llanos de Challe. Por su parte las poblaciones de perros asilvestrados son modeladas por variables naturales del ambiente, por consiguiente sus poblaciones también se han recuperado en los últimos años, lo cual se ha evidenciado, principalmente en el PN Pan de Azúcar debido a su cercanía a Chañaral, con el aumento en el avistamiento de huellas de perros y la existencia de ataque sobre crías de guanaco.

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