Revista Chile Forestal N° 396, octubre - noviembre 2020

Chile Forestal / 69 ÁRBOLES URBANOS Fuente: Libro Árboles Urbanos de Chile. Guía de Reconocimiento. Autores: Aída Baldini, Andrea Alvarado, Felipe Guajardo. Nombre científico : Melia azedarach L. Género: Melia Familia: Meliaceae Orden: Sapindales Clase: Magnoliopsida Descripción: Árbol caducifolio o semicaducifolio en algunos casos, de copa globosa y extendida, que puede alcanzar hasta 15 m de altura y 6 a 8 m de diámetro de copa. Fuste recto y ramas frágiles, de corteza oscura, fisurada y rugosa. Hojas compuestas, imparipinnadas, alternas, de gran tamaño de 25 cm llegando incluso a 100 cm de largo, pecioladas, con 3 a 11 pares de folíolos opuestos o casi opuestos y uno terminal, la forma de los folíolos oval-lanceolados, con bordes aserrados o lobulados, de 2 a 10 cm de largo, de color verde oscuro en el haz y más claros en el envés. Flores pequeñas y fragantes, reunidas en panículas largamente pedunculadas, de color lila claro y constituidas por 5 sépalos, 5 pétalos y 10 estambres soldados entre sí por los filamentos, formando un tubo de color violeta oscuro. La floración ocurre a fines de la primavera o comienzos del verano. El fruto es una drupa esférica, de 12 a 18 mm de diámetro, lisa, de color amarillo ocre, que cuelga en grandes racimos durante todo el invierno, dando al árbol un aspecto muy particular cuando está desnudo de hojas; la pulpa, maloliente, es tóxica para los animales, y rodea a una semilla leñosa y dura. Presenta raíces muy ramificadas, oblicuas, iguales o fasciculadas, que puede llegar a formar una champa compacta en suelos muy húmedos. Especie de crecimiento muy rápido y con una longevidad cercana a los cien años Distribución: Especie originaria de los montes Himalaya, y actualmente se encuentra naturalizada en todas las regiones tropicales y subtropicales del mundo. Se difundió a mediados del siglo XIX como ornamental en Sudáfrica y América, donde se naturalizó con rapidez, convirtiéndose en una especie invasora que desplazó otras autóctonas. Requerimientos ecológicos y manejo: Árbol rústico, poco exigente en cuanto al tipo de suelo y clima, sin embargo, se desarrolla bien en climas cálidos y templados en suelos fértiles, bien drenados y con humedad, donde las temperaturas no sean muy bajas. Se adapta bien a las sequías, a los suelos ácidos o alcalinos y a la salinidad. Corresponde a una especie que necesita exposiciones soleadas, pero se puede adaptar a la semisombra. Tolera de forma regular la contaminación urbana e industrial, las heladas suaves y los vientos fuertes. Soporta podas de formación de diámetros pequeño, no son aconsejables las podas severas. En general, en la adultez responde mal a podas intensas, pero sí se le puede aplicar podas livianas de formación para corregir alguna rama defectuosa o muy baja en su juventud. Dependiendo de la intensidad de las podas puede generar numerosos brotes los que deben eliminarse para mejorar el aspecto de la copa. Desafortunadamente a veces se le rechaza por la abundancia de sus frutos, que permanecen en el árbol a veces más de dos temporadas. Se propaga bien por semillas, de excelente poder germinativo, y también por esquejes. El trasplante a raíz desnuda se debe realizar en los períodos de invierno y primavera. Aspectos sanitarios: Especie reconocida por producir compuestos altamente tóxicos para insectos en estados inmaduros, siendo utilizada incluso como un insecticida. Sin embargo, es fuertemente atacada por insectos succionadores que provocan la presencia de mielecilla, factor muy negativo en una especie arbórea urbana. Por esta razón, se debe mantener un programa de desinfección en forma permanente con la aplicación de insecticidas sistémicos. Recomendaciones del lugar de plantación: Especie recomendada para su uso urbano en Chile central, por su forma y su rusticidad, ideal para todo tipo de área verde y vías de tránsito, tanto como individuo aislado, en grupo o en alineaciones Usos y funciones: Se emplea como especie ornamental. En la Isla de Pascua, donde se le llama Tahiti-miro, se ha naturalizado. Los hindúes utilizan sus flores, que son muy perfumadas, para toda clase de ceremonias y hacen collares con sus frutos. En Argentina se le ha plantado con buenos resultados como árbol maderable. Las hojas, tallos, frutos y semillas se usan como insecticida. La actividad insecticida de M. azedarach se debe a un grupo de triterpenoides biológicamente activos, que tienen efecto antialimentario, es decir, inhiben la alimentación de insectos fitófagos mordedores como coleópteros y larvas de lepidópteros. Con las semillas de carácter óseo se puede fabricar collares y rosarios. La madera, de buena calidad y fácil de trabajar, se usa preferentemente para fabricar terciados, chapas decorativas, puertas y ventanas. Como leña tiene mucha aceptación ya que prende bien, inclusive estando verde. Paraíso, árbol del paraíso, melia, lila de la India

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